Historias Para Pensar 64

Reflexiones a la mitad del camino
(Verdades de la vida)

Tengo 40 años, o lo que es lo mismo, me hallo a la mitad del camino. El día en que reparé en esto sentí pánico, pero al cabo de unas semanas, al reconciliarme con el hecho de que “la vida es un viaje con destino final”, como observó el poeta Carl Sanddburg, recobré la serenidad.
Le pregún té a un vecino, que tiene 83 años:
-¿Cómo le va?
Y él, apoyado en su bastón, me contestó:
-¡Mejor que nunca!.
He aquí, pues, mis reflexiones a la mitad del camino que, espero de corazón, consolarán al afligido y afligirán al despreocupado.
* Nada causa más estrés que tratar de ser una persona distinta de la que se es.
* Cuando se deja de frecuentar a los verdaderos amigos, se pierde el equilibrio.
* No cesa de sorprenderme que las personas crean que sólo a ellas les ocurren las cosas que les ocurren.
* A menudo, quienes vacilan en hacer planes es porque dudan también de su capacidad de cumplir.
* Cuando no se conoce personalmente a individuos de otros grupos étnicos, religiosos o culturales, es muy fácil creer cosas horribles de ellos y tenerles miedo.
* El poder del más absolutista de los dictadores no es tan grande como el del padre sobre su hijo (he ahí lo importante de desempeñar el papel con responsabilidad)
* Sigo dando importancia al aspecto, (presencia), aún cuando he tropezado con algunos idiotas muy bien vestidos.
* Cuando cometas un error, escribe lo que hayas a-prendido antes de que transcurra una semana. El acto de escribirlo y leerlo quizás te ayude a no repetirlo.
* Todo niño debe saber tres cosas: quién manda, cuáles son las reglas y quién es el encargado de hacerlas cumplir.
* Creo que quienes trabajan 12 horas diarias deberían volver a casa con hogazas de pan más grandes que quienes trabajan ocho.
* Algunas ideas son tan estúpidas que sólo los intelectuales las creen.
* En cualquier situación, decida pronto qué aspecto de ella es el más importante para usted (cuidar los afectos), y actúe en consecuencia.
* Es mucho mejor intentar y fallar que no emprender algo por temor a equivocarse.
* Cuanto más envejezco, más sinceras son mis oraciones.
* Si no defiendes tu honor, la gente supondrá que no lo tienes.
* La gente ociosa suele sentirse más cansada que la que trabaja.
* Es muy importante reconocerse el mérito de haber superado el sufrimiento de la vida.
* Como lo demuestra la historia, es mucho más fácil predecir la conducta humana que el estado del tiempo.
* Los niños que aún no llegan a la adolescencia tienen la edad ideal: son demasiado grandes para despertarlo a uno por las noches, y demasiado pequeños para que le pidan prestado el auto.
* Una línea recta, es la distancia más corta entre un bebé y cualquier objeto frágil.
* El problema de vivir solo es que siempre le toca a uno lavar los platos.
* Un buen arquitecto puede mejorar el aspecto de una casa vieja simplemente explicando lo que costaría una nueva.
* Lo que somos equivale a la suma de nuestras decisiones de cada día.
* Nunca he conocido a nadie que sea a la vez divertido y estúpido.
* Cuando un hombre está enamorado o endeudado, la ventaja es de un tercero.
* Si quieres hacer algo, hazlo ahora. Los mañanas están contados.
* El corazón es el órgano más tosco del organismo. La ternura está en las manos.
* Hay dos clases de personas que nunca deberían decir “¡Uy!”: los dentistas y los magos.
* Hay dos tipos de niños: los que están sucios y los que aún no se ensucian.

Fuente: Internet.
Autor: Por Michael Levine