Humor

-¿Supersticioso yo? ¡No, ni en broma! ¿Acaso no sabes que la superstición trae mala suerte?

-¿Por qué las monjas no llevan sandalias?
-Porque son más devotas.
 
Ya de madrugada, la mujer escucha llorar a su hijo y le dice al marido:
-¿Puedes cambiar al bebé?
Y el marido responde:
-Creí que nunca lo pedirías. ¿Creés que me lo cambiarían por una Play Station 4?

Llega un pretendiente gallego a la casa de su enamorada:
-Buenos días. Vengo a pedir la mano de su hija.
Y pregunta el padre:
-¿Cuál, la mayor o la menor?
-¡Ah! ¿Pero que no tiene las dos manos iguales?

Toc toc
-¿Quién es?
-Abraham.
-Hasta que no me digas quién eres, no.
-¡Abraham!
-¡Pero decime quién sos!
-¡Abrahaaaaam!
-Lo siento, pero si no me dices tu nombre, te quedás ahí...

En la tienda de regalos.
-¿Cuánto cuesta ese oso de peluche?
-Seiscientos cincuenta pesos.
-¡Me lo llevo! Aquí tiene el dinero.
-¡Espere! ¡¡Estos billetes son falsos!!
-¿Acaso el oso es de verdad?

-¿Cómo se dice “perro”
 en inglés?
-Dog.
-¿Y veterinario?
-Dogtor… y si es mujer “dogtora”.